
La moda del 3D ha llegado definitivamente. "Avatar" sentó el precedente y abrió el debate de que el futuro del cine, en un panorama marcado por la guerra de las descargas, pasaba por el 3D y por ofrecer al espectador aquello que no podía encontrar en casa.
La moda sigue con "Alicia", de Tim Burton y una larga lista de películas que ya se producen con esta tecnología.
Pero el 3D no sólo ha llegado al cine. Televisores que incorporan esta tecnología, ordenadores, programas informáticos y... sí, incluso impresoras.
El pasado lunes HP presentó su nueva línea de negocio basada en la moda de la tercera dimensión. Se trata de un aparato sencillo y sin necesidad de una gran instalación. Por el momento, su uso no está enfocado a de un usuario normal, si no que se trata de una herramienta destinada al entornno del diseño, la arquitectura o incluso a la medicina. De la misma manera que las impresoras tradicionales crean imágenes a partir de pequeñas aplicaciones de tinta, las tridimensionales son capaces de fabricar objetos sólidos mediante la inyección de miles de finas capas de plástico transversales.
Esta nueva impresora consigue generar modelos tridimensionales físicos de cualquier elemento. Su nombre, Desingnet 3D y su precio, 12.500 euros con impresión en blanco y negro y 6.200 con impresión a color.
Aquí podeis ver un estupendo reportaje que explica su funcionamiento: